miércoles, 10 de diciembre de 2014

No puedo evitar las sacudidas,
algún encontronazo de repente,
que recuerde que a pesar de esta sonrisa,
este año no fue fácil, ni hubo suerte.

Unos meses, jugué a equilibrista,
y envidaba, a por todas, a la grande,
está claro que perdí el punto de vista,
y sorprendí a más de una con disfraces.

He perdido diez kilos de coraje,
he dormido casi el verano entero,
he pasado mucho tiempo en hospitales,
y he querido alguna vez volver a enero.

Reconozco que el otoño me ha curado,
que por fin conseguí cruzar el charco,
y he jurado a toda costa que consigo,
que ya jamás habrá cosas "de paso".

Pero a veces, se descoloca el viento,
y me digo a mi misma muy despacio:
"Recordar a cosa hecha es de valientes,
no permitas que te gane un calendario"

2 comentarios: